Otra queja de los servicios técnicos de Liebherr. Tengo desde hace tres años un frigrífico Liebherr ICN 3366 que incorpora fabricación de cubitos de hielo (IceMaker, que le llaman ellos). El frigorífico funciona perfectamente, pero dos o tres veces al año dejaba de fabricar cubitos. Entonces yo cogía un secador de pelo y le pasaba calor tanto al sistema de dentro del congelador, como al sistema de la parte superior de dentro de la nevera. Después de ese procedimiento el IceMaker volvía a funcionar. Por tanto yo pensé que se trataba de que la tubería que llena la cubitera de dentro del congelador se congelaba y eso impedía que el agua entrase en la cubitera.
La última vez que eso sucedió, en Enero de 2021, ya no fui capaz de resucitar el IceMaker. Así que llamé a un Servicio Técnico, al día siguiente acudió un técnico, le hizo una serie de comprobaciones y determinó que el fallo estaba en la placa electrónica que no daba tensión a la mini-bomba que suministraba agua a la cubitera. Como tengo formación en electrónica industrial, desmonté esa placa, y le hice una inspección con lupa. La placa aparentaba estar bien, con componentes SMD, y ningún componente estaba quemado. Además estaba barnizada lo que le hacía resistir bien la humedad. EL técnico me envió un presupuesto que ascendía a 250€. No es que fuese un precio desorbitado para cambiar una placa a domicilio, pero así a ojo, esa placa no costaba más de 80€ DE COSTE. Ya se sabe que luego los precios se incrementan con transporte, horas de trabajo, desplazamientos, etc (cobran entre 50 y 60€ por hora). Lo que ya puse en duda era que el problema estuviese en la placa. Seguidamente llamé a otro "Servicio Oficial" recomendado por Liebherr. Ese técnico comenzó a mirar el depósito superior, ya que dijo que él dudaba de que la culpa fuese la placa. Mirando un poco por encima ese depósito (que incluye la mini-bomba), determinó que había que sustituirlo. Me presupuestó 425€ por la reparación, ya que para reemplazar ese depósito había que extraer la nevera -es panelada- entre dos técnicos y por tanto la mano de obra se encarecía. Como soy bastante habilidoso, yo mismo desmonté el depósito (cosa que el técnico no hizo), extraje la bomba, la desmonté y vi que el motorcito, que no cuesta ni 3€ en China, tenía el eje trabado. Lo desenganché y volví a montar la bomba. Monté el depósito, y el Ice Maker volvió a funcionar. Viendo la referencia de la mini-bomba, buscando por Internet aparecío que estaba fabricada en China (cómo no) Y CUESTA 16€. O sea, que el Servico Técnico debería saber que sustituir la bomba de 16€ no requiere más de media hora, no hace falta extraer la nevera, y me hubiese costado unos 150€ en vez de 425. Así que parece ser que los seminarios de formación de esos técnicos deja mucho que desear.