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Qué voy a decir que no se haya dicho ya. Que contraté con ellos una reforma que tenía que durar un máximo de 2 meses y que duró diez; que me dejaron muy malos acabados. Que me rompieron múltiples muebles y arreglarlos cuesta casi 3000 euros y que no se hacen cargo sino de una cuarta parte. Que me presupuestaron muchos más metros cuadrados de los que tenían que demoler de papel pintado, de refilar, de lijar, de imprimar, de pintar; Que me presupuestaron trabajos que luego no hicieron y que no me devuelven el importe de los mismos; Que me presupuestaron cosas que jamás iban a ser utilizadas en la vivienda; Que sus trabajadores "perdieron" diversos enseres de mi casa; Que tengo que gastarme dinero para recurrir a un abogado, un procurador y unos peritos para llevar a Leroy ante los tribunales de Justicia. Que como ya saben que voy a ir por vía judicial no me devuelven el sobrante a mi favor de la liquidación de los presupuestos (me refiero a la parte reconocida por ellos claro, que por cierto modificaron a su favor tras saber que les llevo a Juicio). Es una pura vergüenza y da pena que las directivas europeas y los derechos que se reconocen al consumidor sean pisoteados porque no hay quién les haga cumplir como debieran y que encima actúan como si la ley no tuviera que ver con ellos al más puro estilo años 20 del siglo pasado.. Por cierto tampoco atienden a la garantía que supuestamente dan ya que tengo diversos problemas y no se dan por aludidos. En fin, esto es un resumen porque me da para hacer un libro. Al que haya contratado una reforma y lea esto le aconsejo que mida los metros de lo que se les presupuesta, que seguramente se llevará una sorpresa. Yo por mi parte lo tengo muy claro, JAMAS VOLVERÉ A COMPRAR NADA EN LEROY MERLÍN NI VOLVERÉ A DEJAR QUE LA SUBCONTRATA DE ÉSTA, LLAMADA SIDEAL INSTAL, ME REALICE NINGUNA OBRA, y al que pueda sentirse identificado con estas líneas por padecer similares problemas, paciencia y abogados, que parece que es lo único que entienden.