MODERNIDAD Y PROFESIONALIDAD… ¿SON INCOMPATIBLES?
El motivo de este escrito es denunciar varias situaciones de desesperación, impotencia y frustración, entre las muchas que se encuentra generalmente un consumidor hoy en día y el desconocimiento de nuestros derechos en situaciones similares:
El día 13 de Noviembre adquirí en la página web www.elcorteingles.es un televisor “Samsung de 37 pulgadas” y un “soporte vogel’s”.
INCUMPLIMIENTO DE PLAZOS
En el momento de la adquisición (que ascendía a 1.392,33€) se me informa de un plazo de entrega máximo de 10 días. Posteriormente, recibo un sms y un correo electrónico, donde se comunica que la mercancía sufre demora.
SERVICIO ATENCIÓN AL CLIENTE INEFICIENTE
Llamo al teléfono de atención al cliente, dónde me confirman dicho retraso y me informan del motivo: el soporte de la televisión no se encuentra en stock. Éste número de teléfono “902.119.368” me deriva al departamento de atención al cliente, que aunque es el mismo teléfono, debo volver a llamar, puesto que al parecer es otro departamento. Sigo las indicaciones y me informan que como el pedido está realizado conjuntamente y bajo las condiciones de “A PLAZOS SIN INTERESES”, no pueden enviar el artículo en stock (la televisión de 37”). Solicito que a nivel burocrático se realice una anulación de pedido, para poder separar los artículos y poder recibir en el tiempo acordado (máximo 10 días) al menos uno de los dos productos.
PATÉTICO SERVICIO DE TRANSPORTE
Realicé reclamaciones por escrito e incluso me personifique en tienda, siempre haciendome caso omiso. Vía telefónica me informaban continuamente que: la mercancía había salido de almacén y en el momento que el camión entrara por la calle Valencia se me informaría de ello. 34 días después, el 17 de Diciembre, me encuentro (sin previo aviso) la televisión en mi casa, dejándosela a la señora de la limpieza.
LA HISTORIA INTERMINABLE
La odisea no acaba aquí, la maldición del pedido gafado me perseguía… el 9 de Enero, es decir, 57 días después, me llama a mi teléfono móvil, extraído de un albarán adjunto, una vecina del 4º piso (yo ni conocía de su existencia, hace un año que vivo en el 1º piso) comunicándome que me habían dejado un paquete en su casa. Quedo con ella, recojo el bulto (12,7 kilos) desciendo con él a pie y sin ayuda, puesto que la finca por el momento no dispone de ascensor.
FALSAS ESPECIFICACIONES DEL PRODUCTO
En la ficha de presentación del producto colgada en Internet, especifica “fácil instalación” y de aluminio. Al abrir el embalaje, observo que es de color negro, no aluminio como había solicitado y que existen infinidad de piezas. Es un producto que tiene un valor aproximado de 400€ y es considerada una pieza de alta ingeniería. Debido a toda la problemática encontrada en ese momento, y decidida a zanjar el problema me resultaba más sencillo realizar el montaje que insistir en seguir reclamando, así que me decidí a montarlo. Cuando ya tenía prácticamente toda la estructura habilitada (6 tornillos enormes perfectamente collados e infinidad de piezas), desde las 20.00h hasta las 24.00h, observo que el colocar la pantalla de grandes dimensiones en dicho soporte no me aporta seguridad y ante la duda decido abstenerme. Al día siguiente vuelvo a llamar al departamento de atención al cliente, y la primera solución que obtengo es: devolver el soporte. Obtengo por mi cuenta el número de teléfono del suministrador de dicho soporte en Barcelona y llamo; me confirman que no es un producto de fácil montaje y consideran que el corte inglés debería enviar a un instalador. También llamo a la sección de electrónica de los almacenes y reconocen que de haber comprado físicamente el producto en su sección esto no hubiera ocurrido. Después de recibir esta información, más indignada aún, si cabe, vuelvo a llamar al departamento de atención al cliente y me sugieren personificarme en los almacenes.
TOTAL DESENTENDIMIENTO
Así lo hago, me realizan una clara explicación, diferenciando entre adquirir los productos en tienda y por Internet. Indican que no tienen relación con las compras realizadas por Internet, aunque acceden a realizar presión, y consigo que el departamento de atención al cliente acceda a valorar si un técnico se desplaza a mi casa.
SIN APORTAR SOLUCIÓN
Después de 15 días, me llaman, facilitándome el teléfono de un técnico del soporte, hablo con él, pero me indica que no se puede desplazar, y me ofrece ayuda vía telefónica, reafirmándome las dificultades de instalación del soporte. Vuelvo a llamar al departamento de atención al cliente y continuo con el mismo problema, un soporte imposible de colocar está en casa a la espera que alguien decida si resulta factible desplazarse a comprobar si la instalación realizada por el momento es correcta y si ofrece estabilidad el televisor en dicho soporte.
Gracias por su atención e intentar ofrecerme una solución.
El motivo de este escrito es denunciar varias situaciones de desesperación, impotencia y frustración, entre las muchas que se encuentra generalmente un consumidor hoy en día y el desconocimiento de nuestros derechos en situaciones similares:
El día 13 de Noviembre adquirí en la página web www.elcorteingles.es un televisor “Samsung de 37 pulgadas” y un “soporte vogel’s”.
INCUMPLIMIENTO DE PLAZOS
En el momento de la adquisición (que ascendía a 1.392,33€) se me informa de un plazo de entrega máximo de 10 días. Posteriormente, recibo un sms y un correo electrónico, donde se comunica que la mercancía sufre demora.
SERVICIO ATENCIÓN AL CLIENTE INEFICIENTE
Llamo al teléfono de atención al cliente, dónde me confirman dicho retraso y me informan del motivo: el soporte de la televisión no se encuentra en stock. Éste número de teléfono “902.119.368” me deriva al departamento de atención al cliente, que aunque es el mismo teléfono, debo volver a llamar, puesto que al parecer es otro departamento. Sigo las indicaciones y me informan que como el pedido está realizado conjuntamente y bajo las condiciones de “A PLAZOS SIN INTERESES”, no pueden enviar el artículo en stock (la televisión de 37”). Solicito que a nivel burocrático se realice una anulación de pedido, para poder separar los artículos y poder recibir en el tiempo acordado (máximo 10 días) al menos uno de los dos productos.
PATÉTICO SERVICIO DE TRANSPORTE
Realicé reclamaciones por escrito e incluso me personifique en tienda, siempre haciendome caso omiso. Vía telefónica me informaban continuamente que: la mercancía había salido de almacén y en el momento que el camión entrara por la calle Valencia se me informaría de ello. 34 días después, el 17 de Diciembre, me encuentro (sin previo aviso) la televisión en mi casa, dejándosela a la señora de la limpieza.
LA HISTORIA INTERMINABLE
La odisea no acaba aquí, la maldición del pedido gafado me perseguía… el 9 de Enero, es decir, 57 días después, me llama a mi teléfono móvil, extraído de un albarán adjunto, una vecina del 4º piso (yo ni conocía de su existencia, hace un año que vivo en el 1º piso) comunicándome que me habían dejado un paquete en su casa. Quedo con ella, recojo el bulto (12,7 kilos) desciendo con él a pie y sin ayuda, puesto que la finca por el momento no dispone de ascensor.
FALSAS ESPECIFICACIONES DEL PRODUCTO
En la ficha de presentación del producto colgada en Internet, especifica “fácil instalación” y de aluminio. Al abrir el embalaje, observo que es de color negro, no aluminio como había solicitado y que existen infinidad de piezas. Es un producto que tiene un valor aproximado de 400€ y es considerada una pieza de alta ingeniería. Debido a toda la problemática encontrada en ese momento, y decidida a zanjar el problema me resultaba más sencillo realizar el montaje que insistir en seguir reclamando, así que me decidí a montarlo. Cuando ya tenía prácticamente toda la estructura habilitada (6 tornillos enormes perfectamente collados e infinidad de piezas), desde las 20.00h hasta las 24.00h, observo que el colocar la pantalla de grandes dimensiones en dicho soporte no me aporta seguridad y ante la duda decido abstenerme. Al día siguiente vuelvo a llamar al departamento de atención al cliente, y la primera solución que obtengo es: devolver el soporte. Obtengo por mi cuenta el número de teléfono del suministrador de dicho soporte en Barcelona y llamo; me confirman que no es un producto de fácil montaje y consideran que el corte inglés debería enviar a un instalador. También llamo a la sección de electrónica de los almacenes y reconocen que de haber comprado físicamente el producto en su sección esto no hubiera ocurrido. Después de recibir esta información, más indignada aún, si cabe, vuelvo a llamar al departamento de atención al cliente y me sugieren personificarme en los almacenes.
TOTAL DESENTENDIMIENTO
Así lo hago, me realizan una clara explicación, diferenciando entre adquirir los productos en tienda y por Internet. Indican que no tienen relación con las compras realizadas por Internet, aunque acceden a realizar presión, y consigo que el departamento de atención al cliente acceda a valorar si un técnico se desplaza a mi casa.
SIN APORTAR SOLUCIÓN
Después de 15 días, me llaman, facilitándome el teléfono de un técnico del soporte, hablo con él, pero me indica que no se puede desplazar, y me ofrece ayuda vía telefónica, reafirmándome las dificultades de instalación del soporte. Vuelvo a llamar al departamento de atención al cliente y continuo con el mismo problema, un soporte imposible de colocar está en casa a la espera que alguien decida si resulta factible desplazarse a comprobar si la instalación realizada por el momento es correcta y si ofrece estabilidad el televisor en dicho soporte.
Gracias por su atención e intentar ofrecerme una solución.